El error que cometen 7 de cada 10 empresas al contratar perfiles técnicos

Contratar perfiles técnicos no debería ser tan complicado. En teoría, basta con definir el puesto, publicar la oferta y elegir a la persona que cumpla los requisitos.

En la práctica, sin embargo, la mayoría de las empresas tropiezan en el mismo punto: se fijan únicamente en la parte técnica y dejan de lado todo lo demás.

Según distintos estudios, 7 de cada 10 compañías han tenido dificultades o experiencias negativas al incorporar profesionales técnicos. Y no siempre por falta de candidatos, sino por errores en el enfoque del proceso de selección.

Cuando saber hacerlo no es suficiente

Un programador puede dominar el código, un ingeniero conocer la herramienta y un técnico resolver incidencias con eficacia. Pero eso no garantiza que encajen bien en la cultura de la empresa o que contribuyan al proyecto a largo plazo.

En Adlanter lo vemos con frecuencia: el conocimiento técnico abre la puerta, pero las habilidades personales son las que hacen que el trabajo funcione.

El problema aparece cuando se prioriza solo el currículum y se ignora la forma de pensar, de comunicar o de trabajar en equipo. Esa desconexión es la que acaba generando rotación, desmotivación o falta de resultados.

El coste de equivocarse en una contratación técnica

Reemplazar un perfil técnico no solo implica repetir el proceso. Supone pérdida de tiempo, de conocimiento y de productividad, además de afectar al clima del equipo. Cuando la incorporación no encaja, todo el departamento lo nota.

A menudo, la raíz del problema está en procesos de selección de personal técnico poco definidos o demasiado rápidos, donde la urgencia por cubrir la vacante pesa más que la reflexión sobre el tipo de profesional que realmente se necesita.

Tres causas que explican la mayoría de los errores

Descripciones de puesto poco realistas

Muchas empresas utilizan textos antiguos o genéricos. No reflejan los retos actuales ni el contexto del puesto, lo que lleva a atraer candidatos inadecuados.

Evaluar solo los conocimientos

En la selección de personal técnico, centrarse en lo que una persona sabe hacer sin valorar cómo se relaciona, se comunica o aprende es un error frecuente.

Dejar fuera al equipo técnico

Quienes van a trabajar con la nueva incorporación suelen detectar enseguida si habrá encaje. No contar con su visión puede hacer que el proceso se desvíe.

 

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Cómo evitarlo: una selección más estratégica

Antes de iniciar un proceso de reclutamiento técnico, conviene detenerse un momento y hacerse las preguntas adecuadas:

• ¿Qué desafíos afrontará esta persona en el corto y medio plazo?
• ¿Qué tipo de habilidades blandas son imprescindibles para el éxito del rol?
• ¿Cómo encaja este perfil con la cultura de la empresa?

Responderlas permite diseñar un proceso más ágil, certero y adaptado a la realidad del negocio. En otras palabras: elegir al profesional que el proyecto necesita, no solo al que sabe hacer la tarea.

El valor de contar con especialistas

La selección técnica no debería gestionarse igual que cualquier otro proceso de contratación. Requiere experiencia, conocimiento del mercado y una evaluación profunda del potencial de cada candidato.

Por eso, apoyarse en consultoras especializadas en headhunting técnico puede marcar la diferencia entre una contratación más y una decisión estratégica.

Cómo podemos ayudarte desde Adlanter

En Adlanter acompañamos a empresas de todos los sectores en la búsqueda de talento técnico, middle management y directivo. Nuestro enfoque combina análisis de mercado, evaluación por competencias y visión estratégica, asegurando que cada incorporación sume al proyecto desde el primer día.

Trabajamos junto a nuestros clientes desde la definición del perfil hasta la integración del nuevo profesional, con un objetivo claro: que cada contratación sea una inversión en crecimiento, no un riesgo.

¿Tu empresa necesita reforzar su equipo técnico?

Contacta con nuestros expertos. Podemos ayudarte a identificar y atraer al profesional que impulse tu próxima etapa de desarrollo.